Recientemente sucedió que estando en una linda cafetería de la Ciudad de México, en el antiguo barrio de Coyoacán, a eso de las 5 de la tarde, en un lugar reverdecido por el follaje primaveral, y acompañada con la presencia de unos alborotados pajarillos que buscan refugio vespertino entre las ramas de los frondosos árboles que nos rodeaban, me encontré con una buena amiga a la que tenía tiempo de no ver.
La Mano, un jardín cultural y de cocina consciente |
Después de los saludos y comentarios de cortesía rutinarios de… “Pero cómo… ¡Que bien te vez!", "Estas igualita a cómo te recordaba de hace 10 años", “Amiga, por ti no pasa el tiempo, dime cuál es tu secreto”, “Wauu…Te vez súper delgada, aquí entre nos… ¿Cuál es la receta?”, nos miramos con esa sonrisa que aparece en los ojos cuando ves a alguien por quien sientes un sincero cariño y un gran gusto de encontrar después de mucho tiempo, pero que pareciera que fue ayer cuando estuvimos juntas por última vez.
Luego de reírnos y darnos un cálido abrazo la invite a sentarse a mi mesita para compartir el delicioso café de olla que prepara Doña Carmelita, la dueña del lugar, junto con unos tamalitos de dulce con pasitas y coco que son una delicia tradicional.
No pasaron ni 30 segundos de silencio cuando a la vez nos sorprendimos con la pregunta de…
¿Y qué te has hecho en todo este tiempo?
Soltamos una estruendosa carcajada por la coincidencia, llamando la atención de todos los que se encontraban cerca de nosotros y volvimos a reír, pero... con un ligero ademan le cedí la palabra.
Ella tomando aire y con un tono de resignación dijo, pues estoy por regresar a Barcelona, mis estudios y trabajo en México terminan este año y extraño a mi familia, amigos coterráneos y sobre todo… La deliciosa paella que prepara mi mamá, sus canelones, la butifarra y la crema catalana que es riquísima, no más de acordarme se me hace agua la boca, mmmmmm, y entonces dijo…
Mira, eso de que somos de buen diente lo aprendí de ti querida amiga y volvimos a reír con un tono de complicidad.
Solo tengo un pendiente agrego, me falta tramitar nuevamente mi carnet de identidad, pero ya tengo la solución, haré una llamada por telefono cita previa dni
y con seguridad obtendré la información que necesito.
Por mi parte, afirme su comentario sin dejar de platicarle que yo estaría de vacaciones próximamente, para el verano, y que nada me gustaría más que visitarla por allá, así seguimos platicamos sobre el tema, hicimos planes y terminamos nuestra tarde de café con la certeza de que volveríamos a encontrarnos muy pronto.
Querida amiga, cuando leas esta nota de blog, sabrás que disfrute mucho de aquella tarde de café coyoacanense, que la recuerdo con cariño y que te extraño, y de una vez te aviso que ya estoy preparando las maletas!!!